31 agosto 2022

"Venus": The Fighting and the Dancing


The year is 1969. The year of Man's landing on the Moon, Senator Robert Kennedy's assassination and the Stonewall riots. A song written by Robbie van Leeuwen and played by the Dutch pop band The Shocking Blue tops the charts worldwide. "Venus" became a global success since the moment it was released. Today, half a century later, "Venus" is a timeless classic, recently incorporated to quality series like The Handmaid's Tale or The Queen's Gambit. It also features in the 2015 film "Stonewall", a riveting account of the historical events leading to the riots in NYC on June 28th of that same year, which brought about the gay liberation movement and, eventually, gay rights, as we know them today.

It is only fair to remember the members of this legendary, though short-lived, band, one of those "one-hit wonder bands" who had a groovy hit single and their 15 minutes of fame: lead singer Mariska Veres (yeah, she's got it!), Robbie van Leeuwen (voice, guitar and sitar), Klaasje van der Wal (bass guitar), and Cornelius van der Beek (drums). Released in 1969, "Venus" still has the power and effect of a dynamite song. Many of us are still dancing to this gem because this song is timeless.

Right before the Xmas season of that year, my beloved aunt Isabel asked me what present I wanted for "Reyes" (the Hispanic version of Santa), which is celebrated on January 6th. At 11, I had already been listening to pop music in English on a local pop music station, LVG (La Voz del Guadalquivir), and was blown away by this song. So I told her what my choice was, wrote down the name of the record for her, and when I went with my family to visit her on Reyes Day 1970, there she was handing me the single with that shocking blue background and Mariska's sensuous cleavage. It was one of the best Xmas gifts I have ever been given. In the early 70s, I would play it over and over again on our portable record player. (Sadly, I lost my vinyl copy.)

Little did I know that the hit "Venus" had, a few months earlier, presided over the dancing at the Stonewall bar in Greenwich Village, as shown in the aforementioned film "Stonewall", when one of the gay patrons (a brave fighting queen) picks up the song on the juke box and everyone joins in the liberating dancing. Now, at 64, I keep fighting for gay rights, trying to convince today's barbarians that LGTB rights are indeed human rights and facing up to the spreading tide of homophobia and bigotry all over the world. I miss the dancing, though! cmg2022

Lyrics and song:

A goddess on a mountain top

Was burning like a silver flame

The summit of beauty and love

And Venus was her name

She's got it

Yeah, baby, she's got it

Well, I'm your Venus

I'm your fire, at your desire

Well, I'm your Venus

I'm your fire, at your desire

Her weapons were her crystal eyes

Making every man mad

Black as the dark night she was

Got what no one else had, whoa!

She's got it

Yeah, baby, she's got it

Well, I'm your Venus

I'm your fire, at your desire

Well, I'm your Venus

I'm your fire, at your desire

She's got it

Yeah, baby, she's got it

Well, I'm your Venus

I'm your fire, at your desire

Well, I'm your Venus

I'm your fire, at your desire.

20 agosto 2022

Antes de la erupción_corto

 

Antes de la erupción fue rodado en localizaciones naturales de Lanzarote, la isla natal del cineasta Roberto Pérez Toledo. Protagonizado por Pablo Capuz, Javier Orán, Javier Morgade, Edgar Córcoles y Jorge Alcocer, cuenta la historia de un grupo de amigos que deciden hacer un viaje soñado para recuperar su amistad tal y como la vivían cuando eran más pequeños. “Este cortometraje es una postal sobre esos primeros días en los que su protagonista suelta lastre y cuenta quién es realmente a sus mejores amigos, mientras llevan a cabo ese viaje a Lanzarote con el que soñaban desde que eran niños”, explica Pérez Toledo. “La identidad es el gran tema de base del cortometraje: la necesidad imperiosa de encontrar tu pequeño lugar en el mundo y ocuparlo”. No fue casual que Pérez Toledo decidiese rodar este corto en Lanzarote. “De pronto me imaginé a estos personajes entre volcanes. Y luego entendí por qué: porque nuestra identidad, lo que somos, es como un volcán que erupciona arrasando con todo. Puedes intentar que el volcán permanezca dormido, pero tu identidad acaba brotando, como la lava. Porque no puedes silenciar ni aplacar lo que eres”.

19 agosto 2022

El infinito en un junco, por IRENE VALLEJO


Leer es escuchar música hecha palabra. Es cercanía y extrañeza. Es a veces hablar con los muertos para sentirnos más vivos. Es viaje inmóvil. Es una maravilla cotidiana. En tiempos de reclusión, hemos comprobado que los libros amansan la ansiedad y nos regalan lejanías. Hoy valoramos -quizá más que nunca- el papel que desempeñan en nuestras vidas zarandeadas por la tormenta y el desconcierto. A lo largo de los siglos, estos cofres de palabras han sobrevivido a guerras, dictaduras, sequías, crisis y catástrofes. En ellos, las utopías esperan días más propicios. Una y otra vez, nos ofrecen en sus páginas -como brazos abiertos- las ideas, las historias y los cuentos que necesitaremos para escribir el mañana... Este es un libro salvado por la bondad de los desconocidos. (Irene Vallejo)

11 agosto 2022

SEMIÓTICA DE UNA IMAGEN: Los adoradores



SE LEE EN 1 MINUTO
Los adoradores salen a las calles de nuestras ciudades para arropar a sus ídolos o celebrar un título tras otro. Los adoradores piensan que sus clubes deportivos son la auténtica marca España, que el negocio de empresas futbolísticas privadas debería ser subvencionado con fondos públicos, como el cine patrio, dicen, cuando olvidan que la mano de obra, o, en este caso, el pie de obra, es mayormente de origen extranjero. Idolatran a unos deportistas multimillonarios (y, a menudo, endiosados) con sueldos obscenos. Los fanáticos del balompié, protagonistas de la Futbolización que nos rodea, oficiantes de esta liturgia pagana, viven su pasión como una experiencia religiosa.

Para satisfacer a los adoradores, la televisión pública abre los Telediarios de máxima audiencia emitiendo un minuto de titulares deportivos (como anticipo a una extensa cobertura al final de cada noticiario), concediéndoles el mismo rango que cualquier otra noticia de relevancia nacional o internacional, porque el fútbol, como dijo aquél, se ha convertido en España en un asunto de Estado. Incluso las cadenas de radio privadas interrumpen la programación habitual para retransmitir encuentros. El fútbol genera la mayor audiencia y el Marca sigue siendo el periódico de mayor tirada.

Definitivamente, visto lo visto, los éxitos deportivos de una excepcional generación de futbolistas se les han subido a la cabeza a muchos compatriotas, los adoradores y las adoratrices del becerro de oro de nuestro tiempo.• cmg2016

07 agosto 2022

¿Por qué la izquierda es superior?

Por ANTONIO MAESTRE

eldiario.es 6 de agosto de 2022

Eso es lo que hemos visto esta semana tras la aprobación del Real Decreto de medidas de ahorro energético. Una oposición basada en la mentira, el histrionismo y la irresponsabilidad que ha realizado una campaña de descrédito a unas medidas que ni siquiera conocía. 

La derecha suele sufrir con el hecho de que las personas de izquierda se consideren moralmente superiores. La lástima para ella es que es un hecho objetivo y empírico, cada vez más demostrable con la simple asistencia a la actualidad política. No es una cuestión solo de moral, es que políticamente la izquierda ha demostrado de manera concreta y material ser infinitamente superior a una derecha darwinista, egoísta, individualista y que solo se preocupa por su interés particular, incluso cuando eso degrada la convivencia, el debate público y los espacios de socialización hasta el punto de priorizar sus posibilidades electorales frente a la supervivencia de nuestro bienestar y nuestro territorio.

La responsabilidad al gestionar los recursos de todos independientemente del coste electoral que pueda llevar hacerlo es una de las principales capacidades que está demostrando la izquierda y que por sí sola demostraría una superioridad moral manifiesta frente a la derecha. Si hay que tomar medidas por un bien superior y colectivo se toman, a pesar de que puedan ser impopulares. La crisis climática conlleva aprobar medidas que pueden ser muy costosas en términos de popularidad porque exigen hacer sacrificios a cambio de una mejora que quizás solo vean generaciones posteriores. No hay muchas mejoras visibles de las condiciones materiales en reducir nuestro impacto medioambiental hoy, pero hay que hacerlas para dejar a las generaciones venideras un planeta habitable. La derecha prefiere el poder hoy y pone piedras en cualquier medida que tenga como principio la sostenibilidad futura, sabe que oponerse le puede proporcionar un rédito presente a cambio de hipotecar el futuro.

Eso es lo que hemos visto esta semana tras la aprobación del real decreto de medidas de ahorro energético. Una oposición basada en la mentira, el histrionismo y la irresponsabilidad que ha realizado una campaña de descrédito a unas medidas que ni siquiera conocía, argumentando dudas y refutaciones que estaban resueltas en el texto del real decreto. Algunos análisis hablaban del relato que se quería imponer con la estrategia mentirosa y trilera de la oposición a unas medidas completamente inocuas para el bienestar de la ciudadanía que buscan el ahorro energético imprescindible en una coyuntura de emergencia, guerra y escasez.

El relato, no importan las políticas públicas. Un análisis que pone en igualdad de condiciones a quienes actúan con responsabilidad con quienes quieren verlo arder todo para heredar los terrenos calcinados. No se valora positivamente en los análisis que la izquierda ejerza su responsabilidad, sino la oposición a una medida coercitiva del Gobierno porque proporciona rédito a la derecha. El argumento esgrimido es que obligar a seguir unas normas pone a la izquierda en un papel de censor, gruñón y mandón, por lo que genera alabanzas el papel de los irresponsables por presentarse como el partido que te deja hacer lo que quieras en libertad porque proporciona réditos electorales. Puede que los proporcione, pero si lo hace es por el papel de los analistas que, situándose en posiciones inmaculadas que no les manchen demasiado, no ejercen un papel crítico contra todas esas posturas que prefieren tomar al poder a hacer lo correcto.

La crisis climática nos ha atropellado y la derecha prefiere que todo quede arrasado con tal de volver a Moncloa. No se trata de oponerse a que los aires acondicionados de los centros comerciales estén a 27 grados, se trata de oponerse a todo aquello que sea necesario para sobrevivir en el futuro con tal de que ellos recuperen el poder. Este verano llevamos más noches tropicales (por encima de 20 grados) y más noches ecuatoriales (por encima de 25 grados) que cualquiera de los 30 años previos. Los días por encima de 35 grados son un récord en casi todas las provincias y nos hemos habituado en algunas regiones a que nunca bajen de esa temperatura. El mar Mediterráneo se ha tropicalizado igualando su temperatura con el mar Caribe al subir más de seis grados y los incendios en España por las condiciones climáticas ya han calcinado más de 200.000 hectáreas, convirtiéndolo en el peor verano en lo que va de siglo. Mientras, la derecha ha convertido poner el aire acondicionado a 22 grados en el Primark en su última batalla cultural, mientras tiene a los enfermos a más de 30 grados en los hospitales públicos que gestiona, con ventiladores que tienen que traer sus familias. ¿Todavía se preguntan por qué la izquierda es superior?